Las grandes decisiones el Valencia de Baraja
Que todo eche a andar de la forma más rápida posible es algo que tiene que darse de manera totalmente inmediata

En el Valencia de Baraja hay que tomar muchas decisiones, y además ha de ser de una forma rápida, porque el mercado no espera, muchos llevan en marcha semanas, y nosotros, como siempre, tenemos que esperar a que en Singapur digan adelante para poder respirar.
Esta forma de trabajar es absurda, luego lo achacamos a que el local management no funciona y que no valen, pero claro, nadie se acuerdo luego que en el trabajo de cada uno le toca tragar con lo que su jefe diga, porque es el jefe primero, y quien paga después. Ante esto yo tiro la toalla, porque si lo dices es que eres un comprado, pero si te callas, al menos para mí, no estás siendo justo, pero bueno, eso, hoy en día, ya da igual.
Volviendo al asunto, el equipo del Pipo está por hacer. Y eso es así porque no hay ninguna venta cerrada, que debería estar ya hecho, y aunque ha llegado Dimitrievski, y parece que hay otro futbolista a punto de hacerlo también, siguen faltando cosas. Se ha de decidir si Peter Federico se queda o no, y en función de ello, ver si tenemos que firmar a Rioja… o al Sevilla y otro extremo más. Lo mismo pasa con el centro del campo, donde no sabemos si seguirá Javi Guerra, pero hay que firmar un perfil distinto a los que hay, sino dos, caso de que el de Gilet salga este verano.
Y arriba, con Duro renovado y Diego López devuelto a su posición, falta otro punta y saber qué hacemos con Alberto Marí, que no se puede pasar otro año más sin jugar, o haciéndolo tan poco. Como guinda a todo, la portería. Sin saber qué va a pasar con Mamardashvili, tampoco se pueden mover más fichas, y eso hace que el tiempo juegue en contra del Valencia, como tantas y tantas veces nos pasa desde hace una década. Semanas intensas, aunque especialmente las que vienen ya.