Los jugadores de fútbol son personas cuando piden seguridad total para el fútbol, y cobrar más dinero

Los futbolistas son personas, sienten y padecen, y tienen familia, cuando piden seguridad total para volver a jugar. Como toca. Cuando piden aumento de sueldo o irse porque cobran más en otro sitio, son igual de personas, también sienten y padecen, y tienen la misma familia. Hay varias posturas con la vuelta al fútbol. Pero las inquietudes que tienen los jugadores, que son personas siempre, son las mismas, en un contexto y en otro. Hoy, algunos son referentes por exigir la vida por delante del fútbol. Cuando miren por su carrera, será lo mismo. Podemos hablar de lo dicho por Gabriel Paulista, Gayà o Rakitic, que pueden ser 3 escenarios distintos. E insisto, todos ellos respetables. Pero el futbolista es persona siempre, no sólo cuando dice lo que todos, o algunos, quieren oír.

El fútbol da de comer a mucha gente en España. 200.000 puestos directos y en torno a los 800.000 indirectos, y es una industria como cualquier otra. ¿No es esencial? Pues como todo en la vida, depende de a quién le preguntes, porque hay mucha gente que no va a cobrar si no se juega. Y eso no tiene que ver con el espectáculo simplemente. El futbolista defiende sus intereses exigiendo seguridad total, como procede, pero es lo mismo que cuando quiere cobrar más. En el primer caso es un referente, en el segundo un mercenario pesetero que se vende al mejor postor. Y no, eso no me vale, porque personas son siempre, no lo olvidemos. Ni ahora ni dentro de unos meses.