Y ahora todo es una mierda en el Valencia
Como suele pasar por estos lares, pasamos de cielo al infierno, y vuelta, en cuestión de días y sin tiempo para tomat aliento

Y en el Valencia, ahora, todo es una mierda. Nosotros somos así, siempre, para lo bueno y para lo malo, especialmente para lo malo, y eso no va a cambiar en la vida. No ganamos a la Real en un partido regular, y perdimos ante Osasuna en otro que fue horrendo en la primera mitad pero bastante mejor en la segunda, y eso que se disputó 70 minutos con uno menos. Pero las ganas siguen latentes, eso no cambia, y en cuanto hay ocasión...
Analizamos poco, seguramente porque interesa menos, y no pensamos en que hay 11 bajas, que serán más, con respecto al año pasado, y 6 altas, que también serán más, y eso equivale poco menos que a equipo nuevo. Pretendemos una máquina engrasada que funcione como un reloj desde el primer día, y siento decirlo, esto no funciona así, ojalá. Y como no ha pasado, que es lo normal, se ha ido a degüello con todo y con todos.
Porque no hay margen a que se haga algo bien, o que salga bien, y siempre es mejor seguir en la mediocridad y en la agonía, que es donde nos hemos movido estos años y que ha creado una especie de exosistema propio para ciertos sectores. La crítica es correcta, es lícita, es absolutamente necesaria, pero una cosa es eso y otra lo que hemos visto desde que expulsaron a Gayá en Pamplona. Porque eso no tiene nada que ver con cuestionar qué falla.