Podemos destrozar a la plantilla del Valencia, pero somos muy hipócritas

El partido del Valencia en Getafe es intolerable. Y el de Mallorca. Y el de Arabia Saudí. Nadie niega algo evidente. 17 jugadores de esta plantilla estaban el año pasado. No falta una sola pieza clave salvo Neto. Podemos rajarles de forma miserable o cerrar filas. Cada uno sabrá. Así de sencilla es la situación ahora mismo en el club, en el apartado deportivo. Los resultados, los buenos resultados, han aguantado toda la tensión latente que se arrastra desde el pasado verano, donde se vivieron episodios muy delicados que todos teníamos muy claro que antes o después pararían factura. Hace unas semanas, este grupo era algo gigante porque seguí ganando partidos aun con 8 bajas por encuentro. Ahora el equipo está fundido, se le nota a la legua, y resulta que son una panda de acomodados sinvergüenzas que mandan en el vestuario más que el entrenador.

Desde aquel partido contra el Madrid, aquel gol en el 94 que nos quitó una victoria que ya era nuestra, el Valencia está dando síntomas de agotamiento de todo tipo. Cuando se le gana al Barcelona es cansancio mental. Cuando te arrasa el Mallorca o el Gatefa es que son unos caraduras. Los propios jugadores son los primeros que admiten las "tracas" cometidas, ya vimos a Gayà o a Paulista, pero una vez pasado el calentón de querer matarlos por esos partidos, que es algo "normal", seguir con la carnicería no responde más que a otros intereses o a un grado de frustración supino. Esta es la plantilla con la que hay que ir o dejar de ir a la Champions League el año que viene. Igual la mitad ya no están, pero nosotros sí. Pensemos un poco. .