Entender lo que supone el crecimiento del Valencia de Baraja

"El Valencia no ha competido a su nivel". Eso decía Rubén Baraja después de la derrota del domingo en Madrid ante el Atlético. Y no sólo decía eso, sino que añadía que “al entrenador también habría que haberlo cambiado al descanso. La primera parte no ha sido reflejo de lo que queríamos hacer. Me ha molestado cómo hemos competido la primera parte. Hoy era un partido donde solo teníamos que ganar. Teníamos que haber sido ambiciosos". Vamos, que no dibujó una realidad paralela, porque eso no tiene sentido.

"Hay dos formas de tomarte una derrota: valorar las cosas que puedes mejorar y la segunda es que los jugadores jóvenes también tienen que saber que llevan una camiseta que tiene un peso y una exigencia y en determinados partidos el rival te puede ganar. Es muy importante el cómo pierdes y hoy no me ha gustado el equipo". Si alguien esperaba que el Pipo arrasara con su equipo, pues lo siento, ese no es el camino, pero hay que apretar, pero sabiendo a quién se aprieta.

Que estos partidos nos pueden pasar, nos pasan, y seguramente nos pasarán, es algo que venimos diciendo todo el año, porque es normal, porque lo bueno y lo malo de ser el equipo que somos son este tipo de cosas. Sólo se puede pensar que esta es una lección, que se ha aprendido hoy más que el día del Athletic, y que esto nos debe servir para madurar a mayor velocidad aún, si es que eso es posible. Y el entorno, no nos queda otra, lo tenemos que entender.