Un naufragio doloroso que deja al Valencia muy tocado
El mercado invernal ha vuelto a ser detonante de fractura, los acontecimientos no han sorprendido pero dejan al Valencia en una situación comprometida
El proyecto de Gennaro Gattuso ha tenido poco recorrido, ayer estalló la bomba y con el paso de las horas se pueden analizar los acontecimientos de manera más fría. La de Gattuso ha sido una muerte deportiva anunciada desde hace semanas, los malos resultados y la incapacidad del equipo para enderezar la situación han precipitado los acontecimientos, pero lejos del hecho concreto, lo más doloroso es comprobar que el escenario se ha repetido y el Valencia CF sigue teniendo a un máximo accionista que parece optar por el camino más complicado y destructivo posible.
La ausencia de fichajes es inexplicable, con mayor motivo si tenemos en cuenta la cantidad de dinero que el club se ha gastado en finiquitos de entrenadores en los últimos años. Con Gattuso todo parecía distinto, al menos de cara a la galería con aquellas constantes visitas a Singapur. Se le prometieron refuerzos y el italiano vio como las palabras quedaron en saco roto, en las últimas ruedas de prensa se apreció a un Gattuso decepcionado y casi hundido; incapaz de conseguir que sus futbolistas fueran competitivos y sin fuerza en su discurso.
Una verdadera pena ya que al margen de que su idea futbolística fuera más o menos acertada, lo que pocos pueden negar es que su figura en líneas generales ilusionó a la afición. Mestalla recobró el ambiente de las grandes ocasiones pero nuevamente se ha firmado otro capítulo que roza el esperpento. Gennaro Gattuso ya es historia del Valencia CF.