Un Valencia de vergüenza

Un Barcelona - Valencia atípico, quizá el que más de la historia, aunque sólo fuera por el marco del encuentro, el estadio Johan Cruyff. Defensa de tres centrales, Rioja suplentes, y arriba Danjuma con Hugo Duro. La idea de partido quedó clara por ambos equipos muy pronto, y los visitantes salieron a atraer defensa rival y generar espacios a la segunda linea, y sobre todo, no cometer errores en defensa. El primer susto fuerte llegó en el 4, cuando Foulquier remataba por error un saque de esquina rival y Agirrezabala hacía una parada enorme.

Nos costaba un mundo salir de nuestro campo con balón, y ellos empezaban a llegar con mucho peligro por fuera. Pasado el primer cuarto de hora el partido era muy azulgrana, mucho, y aunque la pelota debía ser suya, arriba teníamos que hacer más daño. El balón nos duraba menos y nada, y eso es siempre hacérselo más fácil al Barcelona, que estaba ganando por aplastamiento la batalla del centro del campo. Y en el 28, lo que se veía venir. Una gran jugada del Barcelona rompiendo la defensa de 3 centrales, dejaba delante del portero a Fermín, y de nuevo el sevillano nos volvía a hacer gol. Todo apuntaba a eso, y terminó pasando a la media hora. El partido cayó bastante, aunque el Valencia no lo aprovechaba para meter miedo, y la sensación es que el Barcelona se daba un respiro. 

La segunda parte empezaba sin cambios en nosotros, y lo cierto es que todo debía ser distinto. En el 48, Ferran tenía el 2-0 de forma clara, mano a mano con Julen, pero su remate se una al palo. Podía ser un punto inflexión porque era la sentencia… o eso era lo que queríamos todos. En el 52, de nuevo la tenía Ferran, y esta vez era Agirrezabala el que tenía que hacer una buena parada de reflejos. Pero en la siguiente jugada, entre el portero y Copete hubo falta de entendimiento y Raphinha se encuentra un balón que sólo tiene que empujar. 2-0 y peores sensaciones que en la primera mitad. Y en el 55, la puntilla, porque con brazos caídos, Fermín podía encarar en la frontal, apuntar y tirar, y Julen tampoco estaba fino. Después del tanto se iban Guerra, Danjuma y Diego López, y entraban Rioja, Ramazani y Ugrinic.

Se cambiaba sistema, piezas, pero tarde, muy tarde. En el 64 una buena noticia al fin, volvía Thierry después de muchos meses, y se marchaba Diakhaby. Pero los errores no entendían de cambios, y en el 65, otro grave en defensa terminaba en el 4-0 y el segundo de Raphinha. Todo mal, muy mal. Y la terrible defensa del Valencia recibía el quinto de manos de Lewandoski después de otro desastre. Se iba Duro y debutaba Beltrán en medio de una dura masacre. En el mercado 85, de nuevo el polaco, VAR mediante, lograba hacer el 6-0 para que el ridículo fuera mayor aún. Así se quedó el marcador aunque, ciertamente, daba igual. Vergüenza.