La grandeza del Valencia no se puede cuestionar nunca

Da igual quién mande, que por más veces que lo repitamos parece que da igual, pero es que es una verdad absoluta e incuestionable

Toni Hernández | 06 OCT. 2022 | 00:04
Mestalla

Dudar de la grandeza del Valencia debería estar penado de alguna forma. Y lo digo completamente en serio, porque aquí hemos llegado al punto de cuestionar lo enormes que somos en todos los sentidos a cuenta de pegarle palos a la propiedad. Un recurso que se ha usado hasta hacerlo poco válido, porque en la vida, ni se hace todo mal ni se hace todo bien, con lo que si lo llevamos siempre al extremo, perdemos por completo el sentido de la realidad. Vivimos una paralela en definitiva.

El Valencia está por encima de quien mande. Pero no ahora, sino que llevamos así toda la vida, aunque algunos olvidan porque es lo que mejor les viene a su relato. El presidente, el entrenador o los jugadores siempre han sido algo secundario, al menos para los valencianista de verdad, esos que van a Mestalla y es posible que ni sepan quién es el rival de turno, porque han ido a ver a su equipo, no al otro. Y siempre, cuando hemos descolgado el teléfono, nos lo han cogido. Siempre.

Valoramos poco, en general, quienes somos, y eso se palpa cuando ves cómo lo hacen fuera. He tenido que trabajar muchas veces lejos de casa, y cuando no estás aquí y hablas de fútbol, y dices que eres del Valencia, amigo, hay que ver la cara de la gente. No podemos volver a dudar nunca más en la vida de nosotros mismos, porque eso es lamentable, pero mucho. Y cuando se tengan crisis de fe, que es algo que se puede dar, cantemos la canción más que usarla sólo cuando interese: “pasa el tiempo, pasa la gente, jugadores y presidentes y nosotros aquí presentes animando hasta la muerte”. Aunque la pueden usar todos, yo sólo la puedo entonar pensando en mi equipo, en nadie más.