José Bordalás, el presente y el futuro del Valencia, pase lo que pase

Tiene que ser el hombre que guía el proyecto a nivel deportivo, mucho más allá de lo que pueda pasar en La Cartuja

Toni Hernández | 20 ABR. 2022 | 00:03
José Bordalás

Yo no quería a José Bordalás como entrenador del Valencia. Lo he dicho varias veces durante este año. Las mismas que he dado las gracias porque haya acabado siendo el técnico que tenemos ahora. El trabajo y el tiempo me han ido convenciendo, entiendo que como a muchos, de la valía del técnico alicantino. ¿Lo hace todo bien? Claro que no, no podemos decir cosas que no son por mucha afinidad que podamos ir teniendo con él. Pero que nos ha hecho mejores de lo que éramos cuando vino, de eso, no puede existir ningún tipo de duda.

La final de la Copa es un punto más, podemos decir que aislado o como guinda, que cada uno lo califique como mejor le parezca, pero lo cierto es que hay un proyecto, hay una idea de equipo, y eso se va notando en las decisiones que se toman, en la identificación de los jugadores con lo que les pide su técnico, que además ejercer como líder, algo que se ha echado mucho de menos estos dos últimos años. Que el alicantino se vaya a sentar en el banquillo para buscar un campeonato de copa es la culminación a un año de trabajo, que sólo es el principio. O al menos eso es lo que queremos todos, por muchas nubes negras que se pinten en el horizonte, que esto es el mundo Meriton y nadie puede estar nunca seguro de nada. Si fuéramos un club normal a todos los efectos, que ya es decir hablando del Valencia de hoy en día, tendríamos claro que Bordalás es el tipo que nos va a marcar el camino en el corto y medio plazo.

Hablar del largo en el fútbol siempre es complicado, y más pensando que estar 4 años en Mestalla es poco menos que una hazaña (el último en conseguirlo fue Unai Emery). Pero también es una verdad absoluta que los ciclos son intensos y pueden marcar mucho tiempo, aunque sea con técnicos distintos, siempre que se mantenga un perfil concreto (el Valencia de 1999 a 2004, por ejemplo), y tenemos a uno que sin duda puede empezar a forjar la vuelta al lugar de donde nunca tuvimos que irnos. Pero eso es otra historia, de la que tendremos mucho tiempo para hablar, pero siempre pasado el famoso 23 de abril de abril, en Sevilla, en el estadio de la Cartuja.