Juan Roig, la compra del Valencia y el Valencia Basket
La mala marcha del equipo de baloncesto ha hecho que haya quien le grite en la Fonteta, algo que si lo analizas, es para salir corriendo
Juan Roig jamás comprará el Valencia, nunca. Y ojalá un día me coma estas palabras, porque sería la mejor noticia que podría tener mi club. De largo, y le pese a quien le pese. Pero es que ese momento no lo veo, de ninguna de las maneras. Y cada día que pasa, cada cosa que ocurre, me hace tener este pensamiento más y más claro. Adelanto que no sé cómo está el Valencia Basket, que no sabría decir más de 2 ó 3 jugadores de la plantilla, pero no anda bien ni en la Liga ACB ni tampoco en Europa. Y encima perdiendo casi siempre como local, algo poco habitual.
Sé que no está fichando temporeros (un término que se usa en el basket para hablar de los jugadores que firmen contratos de días o de meses, y que están de paso siempre), y andan sufriendo una plaga de lesiones que tiene a media plantilla KO. Eso merma, pero Juan se niega a fichar ese perfil de gente. Pitos y gritos en la Fonteta, incluso algunos subidos de tono como se podía leer en las redes. Desde la distancia emocional de no seguir el día a día de ese club, algo inaudito. Por muchas cosas, y que sirve como una perfecta analogía para el Valencia.
Sin Juan Roig no habría ACB en Valencia. Sólo tenemos que ver qué deportes de élite, de los "importantes", existen a nivel de clubes en la ciudad. Mucho menos se podrían haber alcanzado las cotas que el "Pamesa", para los mayores, ha conseguido. ¿Una mala racham falta de fichajes, y la gente le grita en un pabellón que él ha remozado con su dinero aun siendo municipal? ¿Imagimanos esto en el Valencia? Quizá, en general, nos tendríamos que analizar como sociedad, en global, y no sólo centrarlo en un club o en otro, porque al final, todos vivimos en la misma ciudad y respiramos el mismo aire. Y si Juan Roig es un "problema", es que igual el problema es otro.