Creer en el Valencia de Bordalás

Las cosas no pueden cambiar del cielo a la tierra por el último resultado, porque eso, ni es bueno ni es sano, y desde luego no es nada justo

Toni Hernández | 03 NOV. 2021 | 08:30
Gol del Valencia

Creer en el Valencia no sólo es un acto de fe como sí lo podía ser hacerlo en el de Javi Gracia. Y no, no es mi intención entrar en un debate o una comparación entre uno y otro, porque no se aguanta de ninguna manera. Más allá de Bordaletas y demás zarandajas puestas de moda que yo debo ser muy antiguo porque no me terminan de gustar, lo que está muy claro es que el técnico alicantino sigue teniendo igual de claras sus ideas hoy que hace unos meses, antes de empezar la Liga. ¿Que puede haber partidos en donde todo el mundo se equivoque empezando por él? Pues claro, faltaría más.

Pero el día que nos zurren, como nos pasó en Sevilla contra el Betis, el cabreo monumental está más que justificado, pero en ningún caso las burradas en modo barra libre para mezclar unos temas con otros y aprovechar lo coyuntura para que cada uno siga con su relato a cuenta de un mal partido del equipo. O mejor dicho horroroso más que malo, no dejemos ningún calificativo pendiente. Creer es creer, y eso no entiende de medias tintas. Porque al final, el hecho de generar un clima de confianza, que tanto el entrenador como los jugadores se sientan respaldados de forma y manera sincera, es otra forma de crecer en este contexto.

Y sí, ya hemos visto que la realidad de Mestalla no es la que muchas veces se nos quiere pintar en las redes sociales, o la que se dibuja en ellas, pero la opinión pública, vamos, los periodistas en definitiva, tenemos que medir lo que decimos y no aprovechar cualquier excusa para decir lo que nuestro relato nos “impone” que debemos decir. El Valencia no se muere menos el día del Villarreal que el del Betis, y sin embargo, si lees atentamente, parecía que el sábado, antes de la cena, era todo lo contrario.