Siento vergüenza, pero ser del Valencia está por delante de todo lo demás

No soporto las lamentaciones y las apelaciones permanentes a que todo es una mierda, aunque se tenga razón, porque el sentimiento manda

Toni Hernández | 25 ABR. 2021 | 07:00
Gayà y Maxi

Como cualquier valencianista, siento vergüenza. Ahora mismo, el partido acaba de terminar hace 40 minutos cuando escribo esto, me duele la cabeza, las piernas, la garganta. No me encuentro bien, y mi mujer, siempre más juiciosa que yo, me pregunta si me vale la pena. Le digo que sí con un gruñido, porque sé que no es racional, pero ser del Valencia es algo que ya tengo para toda la vida, que de alguna manera he inculcado a mi hija sin buscarlo, y a lo que no puedo renunciar.

Y claro que tengo ojos en la cara, como todos. Y no entiendo qué hace Javi Gracia en el banquillo de este equipo. Y la razón por la que Anil Murthy aún es el presidente del club. Y que Peter Lim no venga aquí desde hace años o dé la sensación que esto le importa un carajo. O que la plantilla es mucho peor que la del año pasado, aunque no tan mala como para estar todos acojonados con el descenso. Que el rato que nos fue ganando el Alavés todos vimos más cerca que nunca, por todo.

Leo todos los comentarios de todo el mundo. Vergüenza, desastre, meme de club, ruina de todo, al borde del abismo, casi desaparecidos, el peor Valencia de la historia, los números más lamentables de un entrenador... Todo eso ya lo sabemos, y cada semana es peor, pero al menos a mí, no me ayuda en nada. Porque al final, el valencianismo me fluye, y en otra época habría terminado discutiendo con todo el mundo. Ahora mismo sólo quiero que esto acabe y alejarme de esto un poco, porque está siendo muy duro. Por todo.