Decir que Uros Racic es un pedazo de jugador no es exagerar, es tener ojos en la cara

El medio centro serbio cada día es más importante, y cada día es mejor, y su trascendencia se nota cuando está... y sobre todo cuando no está

Toni Hernández | 13 ENE. 2021 | 07:00
Uros Racic

Uros Racic es un pedazo de jugador que tiene el Valencia, que costó 3 millones de euros, cada día parecen menos, y que hace bien poco amplió su contrato con el club de Mestalla. Hay que darle las gracias a Pablo Longoria, que fue el hombre que lo trajo, porque lo conocía mejor que nadie. En un año como este, en el que poco menos que todo tiene que estar mal y que no hay resquicio para tener una mínima buena noticia, nos estamos dando cuenta que el serbio es un tipo con el que se puede pensar en construir algo importante con la ayuda de otros que están dando una versión enorme. Y en un contexto que no puede ser más negativo.

Alguno parece que esto no lo lleve bien, o que le sepa mal, pero ves el partido de Racic en Valladolid, especialmente la primera parte (cuando mejor estaba físicamente), y las dudas se te deben despejar, a no ser que tengas otros intereses. Cuando esté al máximo de su potencial, que por culpa de los vértigos no ha podido ser, y en un sistema como el que se vio en Pucela, con la forma de jugar del equipo en todos los sentidos, lo de Racic puede ser un espectáculo. Al final parece que sólo asociemos estas cosas cuando se va arriba en la tabla, y eso tampoco es así.

Lo que está dando el serbio, cada vez un poco más y un poco mejor, es una gran noticia, que junto con otras que vamos viendo, nos dicen que si salimos de esta y los que mandan no se vuelven locos otra vez, tenemos una buena base para hacer un buen equipo. Me alegra mucho ver a jugadores del Valencia haciéndolo bien, vaya que sí me alegra. Que no nos ciegue el odio por otras cuestiones, que eso es otro tema.