Sentido de club en el Valencia

Ahora prima más el tener razón, el generar más tensión, cuando en juego tenemos muchísimo para el futuro a corto plazo de la entidad

Toni Hernández | 23 FEB. 2020 | 10:26
Kevin Gameiro

El sentido de club en el Valencia es algo que nunca hemos tenido demasiado desarrollado, aunque siempre hemos tenido la gran suerte de contar, a lo largo de la historia, con algunos personajes icónicos que sí han tenido esa visión, gracias a Dios. Y es por ellos que hemos cumplido 100 años, no lo olvidemos. El fútbol es algo muy complejo y muy sencillo al mismo tiempo, y que está rodeado de un ruido siempre permanente, que aporta poco, pero que resulta muy molesto. Este Valencia, el de Peter Lim, lleva haciendo mal una cosa desde hace tiempo: no hablar claro a la gente, no decirle abiertamente al valencianismo cómo son las cosas. Aquí se vendió que venía el “Tío Gilito” con la chequera sin límite, y 5 años más tarde, seguimos viviendo en el mismo mundo de fantasía.

En verano se produjeron cambios muy drásticos, muy salvajes. ¿Se debió echar a Marcelino? Si había que hacerlo quizá hubiera debido ser antes. ¿Se debió cesar a Alemany? Personalmente hubiera peleado por retenerlo casi al precio que fuera. Pero al final, y es algo que sólo nos acordamos cuando se pierde, a un equipo de fútbol, a cualquier equipo de fútbol, lo sostienen o lo dejan de sostener sus jugadores. Podemos mirar al Barcelona de Bartomeu, que con un lío descomunal tienen a Messi y aún terminarán ganando una Liga regalada. ¿Qué es el sentido de club? Ayudar mientras sea posible alcanzar la meta que se busca, y una vez que esté claro no se llega, que ojalá no sea el caso, sacar toda la rabia crítica, que para eso siempre vas a estar a tiempo.