Ganar a Osasuna primero, seguir en guerra modo Valencia de Peter Lim, después

Que Peter Lim se vaya del Valencia vendiendo sus acciones, que todo el proyecto de Meriton sea una gran mentira y que todo termine como la serie Los Serrano, que todo haya sido un sueño, que no haya pasado, puede depender en parte de perder contra Osasuna en Pamplona. Pero que esa derrota se produzca también puede sumir a todo el mundo en una depresión que no la cura proceso de venta alguno, cambio de dueño o giro dramático a los acontecimientos que valga (por seguir con series de ficción) que valga. Y es que hoy solo vale ganar, porque todo lo que no sea llevarse la victoria sería un desastre, porque es un rival directo por eludir el descenso y porque el equipo lleva sin ganar un puñetero partido de Liga desde el 16 de octubre en Gijón, ya va camino de 3 meses.

Y quien no entienda que antes va lo urgente que lo importante, se equivocará, aunque aquí cada uno tiene derecho a decir y pensar lo que le de la real gana, que para eso estamos en un país presuntamente libre. El pensamiento como aficionado debe ser el de ganar el partido por encima de todo. El pensamiento de los medios de comunicación que dicen ser pro Valencia debe ser el mismo, aunque está claro que muchos aplican la máxima marxista del "cuanto peor, mejor", que viene como anillo al dedo, porque aunque se está en un momento más que delicado, las guerras y guerreras para mandar bajo la bandera del valencianismo siempre están a la orden del día. Como dice mi amigo Alberto Santamaría, O-SA-SU-NA.