El nuevo Valencia de Peter Lim, versión 3.0

Con la llegada de Prandelli se cierra un círculo que debía haberlo hecho antes, pero no es tarde para nada, salvo para no cometer más errores

Toni Hernández | 30 SEPT. 2016 | 00:02

El nuevo proyecto de Peter Lim para el Valencia de Meriton ha cerrado su particular proceso de formación, porque se ha conseguido armar una buena plantilla, mejor que la del año pasado sacando jugadores por cantidades brutales de dinero que no lo valían, junto a otros que no contaban para nada, se ha puesto un entrenador como Dios manda, que luego saldrá mejor o peor, y nos hemos olvidado del prometedor y pedante Pako Ayestarán, se han ganado dos partidos con Voro aunque se perdieran cuatro con el vasco, y aunque ha costado más de la cuenta y Jesús García Pitarch ha cometido algún que otro error evitable, este Valencia es mejor que el anterior. Y Cesare Prandelli sólo viene a poner el refrendo a toda esta situación y, si el fútbol lo quiere, incluso puede ser la primer piedra de un Valencia de éxito.

Desde antes de empezar esta campaña he sido optimista, no tengo claro si es porque uno anda harto de estar de mal humor o si es que los años te hacen ver más allá de lo evidente, o simplemente que cuando tienes claro que algo va a salir, acaba saliendo. Recuerdo un sábado por la mañana de hace muchos años, tantos como 19, cuando el club nos convocó para presentar a un nuevo entrenador, Rinaldi se llamaba, o Claudio Ranieri, que al final el gran Paco Roig me hizo el lío. Salí convencido de que saldría bien, y se apoyó a un tío que estaba como una berenjena, pero que forjó el mejor equipo de siempre, aunque estuvo a un gol de Mendieta de irse a la calle. Me pasa algo así como Meriton y Peter Lim. Algunos le llaman hacer la pelota, otros, o sólo yo, intuición.