Para un pequeño aficionado del Valencia, el día más bonito del año

Dejemos disfrutar a la gente en paz, especialmente a aquellos que son más pequeños y valoran mucho más estos días

Toni Hernández | 09 AGO. 2025 | 00:06
Valencia CF

El día de la presentación del Valencia es uno de los recuerdos que guardo de cuando era niño. Y hablo de hace muchísimos años, cuando en el mejor de los casos nos juntábamos unas 3.000 personas en la tribuna de Mestalla cualquier mañana entre semana. Salían los jugadores, calentaban un poco y solían hacer un partidillo entre ellos. Pero ese día era especial, porque los veías de cerca, se escuchaban las conversaciones, había un buen ambiente y no existía ningún tipo de tensión por ganar o perder.

Es obvio que todo ha cambiado mucho, para bien y para mal, pero la esencia de ese día grande sigue existiendo, aunque los componentes del ejército de la amargura se empeñen en que no, porque claro, sonreír no se contempla en su forma de ver la vida.

Que hoy irán turistas al campo es obvio, porque si yo estuviera en otra ciudad europea, o no europea, y hubiera un evento deportivo, también iría (pueden preguntar a mi mujer los interesados), pero habrá familias enteras que aprovecharán el día para visitar el templo, hacerse fotos, animar al Valencia y disfrutar de un día en su casa.

Porque posiblemente no vuelvan en todo el año por muchas cosas, o lo hagan de manera esporádica, y tratar de joder, se dice así, a un niño un día como este me parece hacerlo conmigo mismo con 40 años menos, y sé que mi padre no lo consentiría, porque para él también era especial.

El Valencia se siente de muchas maneras, de muchas formas, y eso es algo que nadie puede controlar. Ni debe. Y si alguien quiere hacer la ola porque le da el punto, pues que haga la ola, por el amor de Dios, que ya habrá tiempo para pasarlas canutas.