“Esta camiseta no la merecéis” o no entender qué pasa ahora en el Valencia

Matar a la plantilla es un error, lo que no significa que no haya que apretarles, pero culparles de lo que pasa no tiene sentido

Toni Hernández | 07 FEB. 2025 | 11:52
Hugo Guillamón

Destrozar a la actual plantilla del Valencia puede ser tentador, pero es estúpido. Lo digo sin pretender discutir con nadie, porque quiero huir al máximo de eso en este momento, pero lo tengo muy claro. Estos jugadores están aquí porque les han traído, y los de casa han tenido que acelerar procesos porque no había más remedio. Y es posible que con tanta prisa varias cosas se hayan hecho mal. No es posible, es seguro, desde luego.

Cada partido hasta el final de esta maldita temporada va a ser extremo, mucho, y eso tampoco es bueno. Y si encima tienes en poco menos de 10 días al Barcelona, tu entrenador no está bien, pero en el encuentro de casa reservas para poder tenerlos a todos en Liga el domingo, la escabechina está servida. Ahora podemos insultarlos, decir que les han regalado la camiseta, que ni en sus mejores sueños esperaban estar aquí... lo que queramos, pero lo cierto es que están.

Cuando hablas con gente de fútbol, de dentro del fútbol profesional, te das cuenta de muchas cosas. Y cuando lo haces con gente de fuera, también. Es inútil ir contracorriente, eso lo tengo cristalino, pero me gustaría que todo el mundo tuviera clara que matar a los que nos tienen que salvar no es lo más inteligente que podemos hacer. El problema de hecho no está ni en el palco, sino en Singapur, y a estas alturas ya debería estar claro.