“El Valencia va a bajar antes de Fallas”
Demasiadas veces el mismo discurso fatalista, que sí, estamos últimos, pero no se puede pensar de este modo

Jamás he visto más pesimismo en el entorno del Valencia. Y confieso que tampoco yo mismo lo había visto todo sumamente negro a estas alturas de año. Lo que vamos a estar en Segunda antes de Fallas es algo que se por poco menos que hecho, y la verdad es que ahora mismo, cuando aún no hemos jugado el partido contra el Sevilla que cierra la primera vuelta, es complicado no pensar de ese modo.
Cuando salió el calendario todos teníamos miedo de empezar mal y que eso pasara factura. El 1 de 15 del arranque fue demoledor, y ahora mismo nos encaminamos a una serie de encuentros contra los de Nervión, la Real Sociedad y el Barcelona, que no parecen lo más propicios para sumar, aunque ya tendríamos que tener claro que lo que nos pongan delante, ahora mismo, es totalmente relativo.
Pero cuando uno ve que en lugar de hacer cuentas positivas, son todas negativas, o mejor, aterradoras, se da cuenta que estamos a un paso de perder la esperanza, y eso sí que es duro, porque significa muchas más cosas que simplemente, entre todas las comillas del mundo, bajar a Segunda División. Me quiero revelar ante todo eso, como he hecho toda la vida, pero vuelvo a confesar que ahora mismo me veo sin fuerzas, sin ganas, sin energía. Y creo que todos, o muchos, estamos más o menos parecido.
Esta guerra que nos hemos montado entre nosotros nos ha desgastado, nos ha agotado, nos ha chupado la sangre, y ahora vemos que nos falta de todo. Hay que pensar en los jóvenes, en los que vienen detrás, y hacer lo posible, y lo imposible, para que ellos no tengan que sufrir la vergüenza de un descenso. Hacer al menos todo lo posible, porque me niego a pensar que en plenas Fallas estemos ya en Segunda.