El entorno del Valencia, ser colistas y lo que queda de Liga

El entorno del Valencia no está llevando como debería la situación deportiva del equipo, y eso no significa ningún tipo de crítica, porque es obvio que hay para volverse loco perdido. Ser colistas después de 15 jornadas, con una parte del club queriendo echar al entrenador, con el dueño lavándose las manos y con todo el mundo al borde de la histeria no es algo sencillo, pero con todo y con eso, nos tenemos que parar a pensar con calma.

Todo lo que está pasando, y lo que se está provocando que pase, es una locura, no se puede negar porque es así. Pero el objetivo no se puede perder: salvar al Valencia del descenso. El ruido, quemarlo todo, cargar contra el que se mueva, y todo lo demás, no va a generar nada, absolutamente nada, incluida la posible venta del club, que durante años se ha asociado a un posible descenso, y no, eso no va a pasar de ninguna de las maneras.

Aquí queremos sangre y culpables, y lo que necesitamos son puntos, aunque está muy claro que esto tiene unos responsables muy claro, y el primero se llama Peter Lim. El problema es que al final se pega siempre más al que se tiene a mano, que también su parte de responsabilidad, pero sin un dueño al que todo esto le importa un carajo, todo lo demás sería poco menos que imposible que pasar. Pongamos por delante al Valencia y no bajar, lo llevo diciendo meses.