Pipo, vamos a sacar al Valencia de esta, seguro
No son sus mejores momentos, sin duda, pero creo que este parón le ha dado unas fuerzas que necesitaba como el respirar

Confianza absoluta en Rubén Baraja como entrenador del Valencia, no puedo pensar de otra forma. Han sido unos días en los que la desgracia que hemos vivido le ha quitado foco, que también le hacía falta, y que ha usado para coger fuerzas, recuperar energías, algo que le estaba consumiendo, porque el desgaste, por muchas cosas, está siendo salvaje.
Hace unos días, no muchos, hablaba con alguien importante de este club y le decía que “siempre he pensado que su prime será como entrenador del Valencia o no será”, hablando del Pipo como técnico. Ha tenido una carrera complicada, mucho. Fue tercer entrenador del Atlético con Manzano, justo antes de la entrada del Cholo. Después estuvo en el Valencia, en el juvenil, un año más de lo que algunos le recomendamos. Y firmó por el Elche en Primera hace 8 años… y por cuestiones burocráticas, el club ilimitado fue ascendido, y aún así, con una plantilla destrozada, hizo un buen año allí.
Al Rayo no tuvo que ir nunca, porque era un fracaso anunciado por todo lo que rodeaba al club en aquel momento. Y en Gijón tuvo un año muy bueno, llevando al equipo a playoff de ascenso, y otro muy malo, porque le quitaron a los buenos y no trajeron a nadie. En Tenerife estuvo brillante, sacando al equipo de un pozo delicado, y en Zaragoza le pasó lo mismo que en El Molinón. Se venía de un buen año, hubo ventas pero no compras, y el nivel de la plantilla cayó.
Después, el Valencia. El todo o nada que lleva viviendo desde el día que cruzó de nuevo el umbral de la puerta. Han pasado muchas cosas, en muy poco tiempo, y aunque algunos ya reniegan de él, otros ya no dudan sino que lo sentencian, algunos, que dirán que es sólo por amistad, que también, seguimos viendo al mismo tipo con ganas de comerse el mundo y hacer de nuevo grande al Valencia. No tengo ninguna duda sobre el Pipo, ninguno, y sólo deseo que todo lo que ha ido hasta ahora mal, simplemente vaya normal.