Un poco de fútbol hablando del Valencia

No es que el tema haya pasado a ser secundario, es que poco menos que resulta residual, y eso es algo que nos debemos hacer mirar

Toni Hernández | 26 OCT. 2024 | 00:01
Valencia CF

Peter Lim tiene la culpa de todos los males del Valencia. Ale, los que viven del fuego más de otra cosa, ya tienen su ración de “sangre”, porque aquí vamos de ese palo en este momento. Pero cuando esa sed se sacia, que tampoco sería necesario, lo que procede es analizar qué debemos hacer para cambiar las cosas, y por encima de todo, llevarlo a cabo, que con armar follón y gritar mucho, como ya hemos visto, no lo vamos a conseguir. 

Y para que Lim venda, alguien debe comprar. Y para que alguien compre, el Valencia no puede ser una jaula de grillos, por decirlo fino, no puede tener esta inseguridad jurídica, y más allá del sentimental que todos le damos y le daremos siempre, debe tener un valor solitario que haga atractiva la inversión. Y eso de “tú vente, que cuando lo compres, ya lo arreglamos”, está muy bien para andar por casa, pero si pensamos que nos lo va a aceptar alguien de fuera es que estamos mucho más perdidos de lo que todos podemos imaginar. 

Y sí, ahora mismo se me puede insultar sin freno, la solución a todos los males del Valencia pasa porque Lim gane dinero, en concreto el que tiene idea de pedir por las acciones. Y nos podemos cabrear con esto hasta no poder más, pero eso no va a cambiar una realidad que es palmaria, que ya hemos visto que no se puede mover, y a la que nos queda, ponerle remedio, nada más. Son ya suficientes años como para saber cómo son las cosas. 

Sin eso, nadie va a venir y él no va a vender. Que aparecerán “figuras” es seguro, de hecho alguno siempre anda por ahí revoloteando, y ahora con saldrán con una cosa nueva (Miguel, me entero de todo, y sin preguntar), pero será de nuevo más de lo mismo, como hasta ahora. Sin convenio no habrá nada, y sin comenzar el estadio, tampoco. Y para eso, como algunos llevamos años diciendo, no queda más remedio que ponerse de acuerdo, aceptar ciertas reglas del juego, y como decía mi padre, tener claro que más vale perder que más perder.

Es lo que viene en las próximas semanas, con fuerza, con mucha gente haciendo mucho ruido, con una movilización social que será brutal, seguro, que contará con un éxito increíble, garantizado, pero que más allá de todo eso, no puede perder el foco en lo que realmente será la solución a los males que tenemos, y que no es otra que la salida de Lim… porque hay otro que entrar para comprarle sus acciones. 

Y es que ya veo pocas ganas de hablar de fútbol, o ninguna. El Valencia de Baraja. El mismo que ha hizo un año por encima de la mejor expectativa, ahora está mal, y encima no tiene suerte. Nos pasa de todo, y no tenemos ganas de hablar de él.