El Valencia se defiende pero ni convence ni ilusiona

La pasada temporada dejó una pequeña esperanza a los aficionados del Valencia debido a la progresión y la aparición de los jóvenes. Se confiaba en que se pudiera mantener la base, algo que se ha hecho de momento pero las palabras de Corona demostraron que el club está abierto a vender en la parte final del mercado tal y como se ha demostrado con Javi Guerra. Más allá de entrar a valorar si la venta era buena en términos económicos, lo que ha quedado claro es que se piensa más en equilibrar cuentas que en crear un equipo competitivo pensando en el futuro.

Corona afirmó que solo faltaría suplir a Peter Federico y no se pronunció por Rioja o Bryan Zaragoza, jugadores que se han alejado. Baraja no puede estar contento con lo ocurrido en el mercado y en el club se han apresurado a evitar que pueda pronunciarse ante los medios en previsión de las cuestiones que podría recibir. A un día de disputar el Naranja y una semana del comienzo de La Liga la ilusión es muy poca.

Corona se ha limitado a esquivar balones y repetir el discurso de los últimos años. El Valencia está muy lejos de lo que fue en el plano deportivo y plantear un objetivo ambicioso en este momento es demasiado aventurado. Puede haber alguna sorpresa en el final de mercado y no se ha escrito la última palabra en cuando a salidas.