La realidad del Valencia

Es muy difícil que el Valencia de Baraja lo haga mejor. Esa es una realidad que debemos tener muy presente, sobre todo en días en los que tenemos cierto punto de frustración por no conseguir victorias que nos podrían acercar más a los puestos europeos. Sí, la primera parte del Mallorca no fue buena, entre otras cosas porque el rival también juega, porque tuvimos el problema de Yaremchuk, porque había titulares con muchos minutos de selecciones, y porque no estuvimos bien, que eso también pasa.

Y luego en la segunda parte, en la que pudimos ganar con cierta solvencia, y hasta perder porque ellos también tuvieron alguna muy clara, vimos cómo el portero visitante hacía una exhicibicón de esas que se recuerda en el tiempo. Si ese muchacho está igual en la final de Copa, el Athletic va a tener que sudar sangre para ganar el trofeo. Pero más allá de eso, y sin hablar de nadie en particular, porque se dio todo, nos falta un punto de calidad.

Y eso no es ni bueno ni malo, es un hecho. A ver, negativo, porque es así, pero cuando exigimos ciertas cosas, nos tenemos que dar cuenta de a quién y cómo lo pedimos. ¿Hugo Duro puede marcar 25 goles en una temporada? Claro que puede, pero no se le puede imponer que sea así, porque su año, siendo brutal, parece que se quede hasta corto por partidos como ayer. ¿Federico vale o no vale por el error ante el gol? Pues ciertamente no, pero es lo que quedará. ¿Pepelu puede lanzar mejor las faltas? Difícil. Se llama calidad, y eso, vale dinero.