La ambición de Baraja debe ser la del Valencia, la de Peter Lim

“Estoy abierto a hablar de futuro con el Valencia si la ambición del club acompaña la mía”. Las palabras de Rubén Baraja la semana pasada en El Larguero de la Cadena SER son claras, muy claras. Y educadas, y valencianistas. Voy a confesar lo que le dije al escuchar la entrevista: “hace muchos años que nadie tiene un discurso tan sensato y tan del Valencia”.

El resto queda entre nosotros, pero es que el Pipo no puede ser más claro, tener más sensibilidad y apoyar más a un club, a un proyecto, el suyo, y a un objetivo, que no es otro que volver a pelear con los mejores, que realmente es donde debemos estar. Él está más que convencido de seguir, aunque tiene claras más cosas: "creo que no es el momento adecuado para hablar de mi renovación.

Todavía queda un tercio de temporada. Voy a estar abierto a hablar”. Todo el discurso va hilado, cogido de la mano, lleno de valencianismo, como no podía ser de otro modo. Y todo pasa por el futuro, por apuntar algo, por tener hambre. "No me da la sensación de que nuestros canteranos se vayan a ir pronto.

Cualquier jugador joven sabe que, si va a Valencia, va a jugar y eso es un escaparate para muchos”, decía el Pipo. Porque sabe lo que piensa su gente, como no podría ser de otro modo, ya que de algún modo, los cría en todos los sentidos. Si le dan lo que pide, que es lo que todos queremos que tenga, tendremos Baraja para años.