Los fichajes del Valencia no funcionan
Canós, Yaremchuk y Amallah están lejos del nivel que se espera y, sobre todo, del que ahora mismo necesitamos

El Valencia cerró tres fichajes el pasado verano que no hay forma de que funcionen. Sergi Canós, Selim Amallah y Roman Yaremchuk, en todos los casos, están muy lejos de lo que se espera de ellos por un lado, y sobre todo, de lo que se necesita, porque sus roles dentro de la plantilla debían ser muchísimo más importantes, y no se encuentra la manera de que eso pase. Más allá de los minutos o partidos jugados, y de las estadísticas tangibles, las sensaciones son las que mandan, y ninguno de ellos está rindiendo como para pensar en que se ha acertado, ni mucho menos.
Entre todos suman apenas una asistencia, y ni han dado buenas prestaciones saliendo de inicio, ni tampoco cambiado dinámicas cuando han partido desde el banquillo. Nadie pone en duda su entrega y su profesionalidad, como que lo intenten siempre, pero al final esto va de resultados tangibles de un modo u otro, y eso no está pasando. Y es que el Valencia de hoy en día no se puede permitir el lujo de fallar en un fichaje, y no digamos ya en tres, porque eso supone que toda la planificación deportiva se ha venido abajo y que poco menos hay que empezar desde cero.
La necesidad en enero, con todos al máximo, es enorme, ya se sabe y se ha repetido hasta la saciedad, pero con este contexto, es obvio que todo se complica un poco más si cabe. Estaremos siendo unos temerarios si sólo vemos el aquí y ahora pensando en la salvación, porque queda mucho, muchísimo, y el equipo sigue cogido con pinzas y en manos de los chavales, que se nos olvide a nadie. Especialmente en Singapur, donde esto es mucho más complicado de explicar... aunque en eso muy poco podemos hacer nosotros.