Hacer madurar a los jóvenes del Valencia a toda la velocidad

“Si en el Valencia queremos que los chavales crezcan, tienes que apoyarlos, quererlos, cuidarlos, mimarlos y sacar su máximo rendimiento. Aunque sea una obviedad, necesitamos que los jóvenes compitan como uno de 28. Hay que insistir, dar cariño, exigencia día a día, mucho vídeo…”.

Las palabras de Baraja, que demasiadas vez caen en saco aunque tengan una importancia mucho más que notable, son el resumen de una situación que no ha provocado él, tampoco los futbolistas, y mucho menos el aficionado, pero que todos los citados deben afrontar de la manera mas valencianista posible.

No estamos en un Valencia normal, eso es algo obvio, y por lo tanto, si pedimos a los que juegan lo mismo que en otras épocas, y no voy al extremo del Doblete, nos estamos equivocando por un lado, y haciendo un flaco favor a esos críos por otro.

El aficionado paga, y por lo tanto manda, pero esto no es sólo un espectáculo, es por encima de todo un sentimiento, una pertenencia a algo muy grande con más de 100 años de historia, y que ahora mismo también se basa en entender un contexto muy duro y muy complicado, pero que es el que nos ha tocado vivir.

A los jóvenes, y los incluyo a todos, hay que mirarlos de otra forma, que no significa que se haga con condescendencia o paternalismo, que eso no les va a ayudar tampoco, pero no podemos “matarlos” de las maneras que usamos muchas veces, porque no son futbolistas hechos, apenas si tienen bagaje y eso sólo lo van a adquirir jugando… y cometiendo errores.

Baraja sabe muy bien lo que está pidiendo, y lo que tiene, y lo digo muchas veces, hay que hacerle caso, porque tiene las ideas muy claras y aplica una filosofía que ahora mismo es la que necesitamos. Pero esto es un todo que depende de nosotros, y tenemos que ser muy conscientes de ello, por encima de las causas que nos han llevado hasta aquí, y de su máximo responsable.