El proceso de venta del Valencia

Lo peor de todo aquello es lo que sembró, que es terrible, y que nos hemos querido aprender nada de cara al futuro

Toni Hernández | 13 MAR. 2023 | 00:01
Valencia CF

Una de las mayores vergüenzas de la historia del Valencia fue el proceso de venta del club. ¿Porque acabó en manos de Peter Lim? Visto lo visto, y quiénes eran todos los que optaban, era poco menos que “susto o muerte”, lo que también nos tendría que hacer reflexionar sobre otros muchos aspectos. Ni una sola oferta valenciana, ni tan siquiera española, cuando estamos hablando de uno de los clubes más importantes que hay en este país, por todo.

Aquel maldito proceso era, además inevitable, porque el banco nos tenía cogidos por salvan sean las partes, y no nos dejaba ir a un concurso de acreedores, que era lo que tocaba, porque hubiera perdido hasta la camisa. Había que acudir a un inversor, no había otra, y haya se presentaron 7 propuestas en las que había de todo menos un Roman Abramovich, que, de alguna forma, era los que todos esperábamos que fuera Peter Lim.

Que Lim venía de la mano de Mendes ya lo sabíamos de antemano, que el club cambiaba en todo, lo mismo, y que hubo más de 50.000 personas recibiendo al actual máximo accionista como si fuera una estrella del rock, en uno de los días más tristes de la historia de Mestalla (lo he dicho muchas veces desde entonces), igual. Salvo y Aurelio eran dos fenómenos, y de hecho eran poco menos que intocables para gran parte de la gente. Y a quien osaba hacerlo se le amedrentaba sin ningún pudor.

Y eso engloba a aficionados y periodistas, que uno, aunque lo vio desde la barrera, aún recuerda conversaciones con buenos amigos que cogieron miedo de ir al campo. Ahora, 9 años después, veo lo mismo, pero con la chaqueta cambiaba. Sigue habiendo una gran vergüenza, la gestión de Lim en este caso, y un ambiente crispado con mucha policía moral de balcón señalando y amenazado, como entonces.

Curiosamente, muchos han sido protagonistas de esos excesos, unas veces a favor de Meriton, y ahora en contra. Mi conclusión sigue siendo la misma: nos estamos cargando el Valencia entre todos, no sólo Lim, y si eso pasa, nadie será culpable, porque algunos hasta se volverán a cambiar de bando por tercera vez, no tendrán ningún rubor al respecto. Y mientras, de forma indefectible, no hay alternativas reales que puedan cambiar este panorama. Aunque de eso hablaremos con más calma.