El chantaje con el Nuevo Mestalla y el Valencia

Aquí nadie puede sacar pecho por nada, nadie, y mucho menos intentar dar lecciones de saber estar

Toni Hernández | 10 MAR. 2023 | 00:02
Nuevo Mestalla

El chantaje, el Nuevo Mestalla, el Valencia y los políticos, una serie de incógnitas que han marcado de alguna forma la actualidad de los últimos días con respecto al club y el futuro estadio. Meriton ha pasado del campo durante años, aunque también es cierto que ha pagado de forma religiosa muchas cosas invisibles en ese recinto, algo que me consta de primera mano. La aparición de CVC, y que el 70% de ese dinero tuviera que ser destinado a infraestructuras, lo cambió todo, aunque haya gente en esta ciudad que se haya montado la película de que han sido ellos los que han dado un giro a todo.

En ese momento, en el Valencia se pusieron las pilas, y se tiene el dinero, de distintos medios, para acometer la finalización de las obras. Pero en ese intervalo, que no ha sido corto, la situación de tensión social y la cercanía de las elecciones, han hecho que los políticos, algunos, hayan aprovechado la coyuntura para estirar un chicle que está agotado, pero al que se sigue intentando sacar jugo. El Valencia no ha chantajeado a nadie, en todo caso ha pasado del estadio, y mucho, hasta que ha tenido el dinero, llovido del cielo de Tebas.

Cuando eso ha sido evidente, los políticos, algunos, han estirado la cuerda pidiendo cosas que no tienen sentido a cuenta del Mundial 2030, que ni siquiera tiene concedido España, y poniendo el grito en el cielo porque no se cumplen los requisitos originales, de 2006… que han sido criticados hasta la saciedad por los mismos que ahora piden que se hagan realidad. Las reuniones han sido una falta de respeto, del Valencia y de los políticos, de todos, y en medio de esa situación, el gran perjudicado ha sido el club, como siempre, porque en él nunca se piensa, ya que es un medio para conseguir algo y no un fin en sí mismo.

Ahora mismo, e insisto, a Meriton esto le ha importado un carajo, los políticos, algunos, no están sabiendo leer la nueva situación, y se están equivocando con mucho. Y claro, el Valencia, que ahora puede aunque sacar pecho no debería ser la forma de actuar, saca el colmillo. Y en ese momento, todo el mundo se enfada. Aunque lo peor de todo es saber que están condenados a entenderse desde el primer día, y no hacen más que intentar disimular como si la cosa no fuera con ellos.