El intercambio de golpes volvió a mandar a la lona al Valencia

Penúltimos y metidos de lleno en la zona de descenso, el Valencia compitió mejor pero falló en los momentos clave. Repasamos los detalles que nos dejó el Getafe-Valencia del Coliseum.

Un nuevo golpe, cada vez hay menos margen de maniobra

Si atendemos a lo visto en la noche de ayer el empate habría sido lo más justo, pero este deporte va de marcar más goles que el rival y saber competir cuando la presión acecha. No se ha ganado ningún partido de liga en 2023 y tampoco Baraja fue capaz de darle la vuelta a una dinámica que ya desespera a la afición.

Samuel Lino, protagonismo y pólvora mojada

El brasileño estuvo muy activo en la primera mitad, rompió una y otra vez la espalda de la robusta defensa del Getafe pero definitivamente no es su año de cara a gol. Falló una ocasión clarísima en boca de gol que pudo cambiar el partido y posteriormente no estuvo bien finalizando otras acciones. Lino se marchó tocado al descanso y está por ver si la contusión le pasará factura.

Más verticalidad y contundencia pero un centro del campo desaparecido

Baraja probó con Yunus, Ilaix y Almeida en la medular pero el experimento no dio resultado. Incapaces de conectar varios pases seguidos y nuevamente con pérdidas peligrosas. El Valencia fue más vertical que en la etapa Gattuso y se puede decir que más contundente en defensa en varias fases del encuentro. Otro punto que mejorar es el balón parado: absolutamente inofensivos en ataque y desastrosos una vez más a la hora de ajustar las marcas.

Problemas añadidos

Una temporada más las lesiones comienzan a ser un verdadero problema para el Valencia. Las sufrieron Thierry, Nico y Cavani, y si el daño fuera poco en Getafe tanto Lino como Gayà se unieron a la enfermería, el Valencia solo disputa ya una competición oficial pero los percances evidencian un estado físico muy justo.Lino siguió en el campo pero Gayà dijo basta y tuvo que ser sustituido en el segundo tiempo.