Una realidad incómoda en el Valencia CF

Opinión/ El Valencia actual no es el de hace unos meses, el equipo todavía no está en el lugar que le corresponde pero es obvio que han cambiado cosas

Jose Hernández | 25 SEPT. 2022 | 08:00
Afición del Valencia

Queda mucho para que el Valencia vuelva a tener el estatus que merece, sigue siendo el cuarto club de España por puntuación en la historia de La Liga pero en los últimos años la mala gestión hizo que se haya navegado en tierra de nadie. Esto es algo que no se puede negar y que a cualquier valencianista con sentido común le duele, pero también es evidente que a día de hoy no existe ninguna alternativa viable a la propiedad y que todas las propuestas (algunas muy radicales y vehementes) han quedado en castillos en el aire que solo sirvieron para agitar al entorno.

¿A quién beneficia que el valencianismo esté dividido? lógicamente a unos pocos, a aquellos que ven en el discurso fácil y la verborrea la manera en la que convencer a los más ingenuos de que puede existir un cambio en la dirección del club únicamente sacando cartulinas y lanzando proclamas, si a ello unimos la colaboración de algunos políticos obtenemos el cóctel perfecto. Pero a la hora de la verdad la realidad sigue siendo cruda, los juzgados no son capaces de tirar por tierra legalmente los actos del club y la decepción está instalada en un sector.

Cada vez que el Valencia obtiene una victoria escuchamos frases del tipo: "Si yo quiero que gane el Valencia", "Yo me alegro de que el Valencia gane", etc. Nadie duda de que esto es así si nos referimos al 95% de la afición, pero, ¿por qué tanta justificación? ¿Acaso es necesario recalcar una obviedad de este tipo? Quizá sea porque realmente a una pequeña parte del grueso de la afición valencianista no le gusta que el Valencia CF haya comenzado a hacer las cosas de manera razonable y les molesta tener un entrenador implicado. Quizá no les guste que este Valencia empiece a parecerse a un club de fútbol y desearían vivir en el caos permanente para poder sacar a flote el relato que responde a sus intereses. Quizá la realidad es incómoda para ellos cuando las cosas van bien.