El Valencia debe vender a Carlos Soler, ya

Se ha deslizado que la situación es irreversible, con lo que ya mismo estamos perdiendo un tiempo precioso para hacer bien las cosas

Toni Hernández | 11 JUL. 2022 | 00:02
Carlos Soler

Es imposible que el Valencia pueda renovar el contrato de Carlos Soler. Su círculo cercano, sin que el club haya desmentido nada, ha deslizado que las diferencias económicas son insalvables. Perfecto, no hay problema, no hay reproches, no hay nada que decir. Siempre nos hemos movido en el mismo principio: pasara lo que pasara, que ni jugador ni entidad salieran mal paradas. Pues bien, ya se ha llegado al punto de los hechos y ha terminado el de las palabras.

Soler no puede empezar la Liga con el Valencia con el contrato sin renovar, y el Valencia no se puede permitir el lujo de que se vaya, gratis, dentro de 12 meses. Esta situación hay que afrontarla ya, zanjar cuanto antes, y sobre todo, no convertirla en un quiste que nos acabe doliendo a todos, algo de lo que servidor viene advirtiendo desde hace ya muchos meses.

Su valor en el mercado, no por su calidad, que es la trampa que se quiere cometer para dar bofetadas, no supera los 20 millones de euros. Porque termina su contrato el 30 de junio de 2023, y en enero, se le puede firmar gratis. Por eso mismo, y que me insulte el que quiera, Ferran, por cómo se vendió al Barcelona (contractualmente estaba igual), no fue una mala operación a nivel financiero. Hay varias ofertas, o intereses, de fuera de España por Soler.

No supera ninguno esa cifra de 20 kilos, y un porcentaje en una futura venta. Y eso hoy, a mediados de julio. Dentro de un mes será menos, porque quedará poco para arrancar la Liga, y si llegamos al 1 de septiembre, Soler no valdrá nada, absolutamente nada. Si no afrontamos las cosas como son, y esta es así, nos estamos haciendo trampas al solitario, y ya somos mayores para eso. Hay que hablar con Rodri, el agente del chico, y veremos si con Mendes, y darle solución a este asunto. Porque ya no es que sea tarde, es que hemos traspasado todos los límites de tiempo habidos y por haber.