Que el Valencia no es Meriton, ya está bien

Los actuales máximos accionistas están, pero pasarán, y los compromisos que tenemos, de todo tipo, perdurarán

Toni Hernández | 24 JUN. 2022 | 00:02
Nuevo Mestalla

Explicar en 2022 que el Valencia no es Meriton. De verdad, que o lo hacemos adrede, o el odio supera todo lo imaginable, o de alguna forma necesitamos convivir con un enemigo para poder dormir tranquilos. Y no me vale decir eso de “claro que sabemos que no es lo mismo”, porque eso es cuando le explicas las cosas a tu hijo, y sabes perfectamente que está pensando en otra cosa.

No, no vale con las palabras, lo mismo que le decimos a Meriton y a Peter Lim, sino que esto va de hechos, como le exigimos a ellos con toda la razón del mundo. Lo que es bueno para el Valencia es bueno para el Valencia, muy por encima de si el que firma es uno u otro, porque en el membrete está nuestro escudo, y nada más. Si hubiera tenido que ser Anil Murthy el que cortara la cinta inaugurando el Nuevo Mestalla, a mí, me hubiera dado lo mismo, porque lo importante habría sido el fondo y no la forma.

Pero estamos en un punto en el que el postureo manda más que el sentido común, al menos de puertas para fuera, y eso es un problema muy grave para todos. Pero mucho. Por desear, y hablo de deseos, yo quiero que renueven Soler y Gayà, y que no haya que vender a Guedes. Y que vayamos al mercado y traigamos los fichajes que hacen falta para que el equipo sea fuerte. Y que el campo se termine de una vez, y que vendamos el actual Mestalla y la deuda se vaya por la taza del WC. Y me importa un carajo gigante que lo haga Meriton o quien sea, porque en la fachada del campo sigue estando nuestro escudo, y nada más.

¿Que con ellos es imposible que se pueda llevar a cabo todo esto? Pues no es fácil y el histórico no habla a su favor, pero ahora mismo dependemos de gestión, o lo que sea, y quien acierta y se equivoca, aunque de forma ejecutiva sea el máximo accionista, de forma efectiva es el Valencia Club d Fútbol. Y gracias a Dios, no son la misma cosa, de ninguna de las maneras.