Las decisiones de Peter Lim sobre el Valencia

Lo que Peter Lim tenga pensado hacer en el Valencia es para no poder dormir. Primero porque todo lo que intuimos es malo, o peor que malo, y no hay a los que agarrarse, que sea real de verdad, para pensar lo contrario. Y segundo, porque si nos orientamos por los famosos y manidos audios de Anil Murthy, lo que hemos pasado hasta ahora puede ser un mundo ideal al lado de lo que viene.

Y en esto quiero ser frío y reflexivo, porque si nos dejamos llevar sólo por la vena del sentimiento le vamos a legar fuego a todo, y aunque sería normal, debemos mirar más cosas. ¿Hay que equilibrar cuentas? Perfecto, vamos a hacerlo, porque la primera premisa de un gestor tiene que ser esa.

¿Cómo se puede hacer? Siempre de dos maneras. La primera es gastando menos, que siempre te hace más pequeño, y la segunda, generando más. Y me gustaría pensar, y ya me estoy dejando llevar por ese optimismo valencianista irracional que me persigue toda la vida, en que el máximo accionista está pensando en todo ello y no en liquidar la mercantil, a lo que le sigo sin ver el sentido desde su punto de vista de inversor.

Vender jugadores es una alternativa, que ha sido usada toda la vida, por Lim y por los que estuvieron antes, pero que él esté contexto sabemos que es pan para hoy y hambre para mañana. No arregla el problema, sólo te permite pegarle una patada hacia delante a la pelota.

¿Eso vale para algo? Si lo que buscas es ganar tiempo para vender, es posible. Si la idea es quedarse a largo plazo, no le veo la ventaja por ningún lado. No tengo ni la más remota idea sobre lo que piensa hacer Lim, aunque me da miedo, como a todos.