El Valencia es imposible que pueda hacer nada con estos arbitrajes

Es imposible aguantar los arbitrajes que sufre el Valencia, es insufrible. Y la prueba más evidente es un partido como el del sábado en San Mamés. No te juegas nada, no tenemos todos la tensión que deberíamos, y aunque el equipo compite bien, te das cuenta que cada decisión del colegiado es rara, es extraña, no tiene sentido y, sobre todo, los criterios son totalmente distintos a los que se dan en otros encuentros... pero en contra. Más allá de decisiones claras, puntuales y flagrantes, es una cuestión de pequeños matices, de riego por goteo más que de una inundación salvaje. Un trabajo de marquetería fina, como me gustaba decir cuando hacía radio.

No me gusta creer en complots ni en campañas, porque luego te encuentras la final de Copa del Rey y no tienes por dónde coger. Pero es que son tantos los encuentros en los han pasado cosas que no se entienden, decisiones en contra que tardan 15 segundos en confirmarse, y a favor que nunca llegadas pasadas algunos minutos, amén de las tarjetas que te sacan y que les sacan, las faltas recibidas y que te pitan... y un sinfín de detalles que, aunque el aficionado no lo llegue a creer, sacan a los jugadores de los partidos, porque es imposible competir así. 

No sé qué hay que hacer, ni tengo tampoco nada claro que se pueda hacer algo. Y para aquellos que quieren ver fantasmas por todas partes, esto no es ni la primera ni la segunda vez que le pasa al Valencia en su historia, ni me temo que la última. Pero lo que sí tengo claro es que así no se puede, más allá de que tengamos un mejor o peor nivel, que nos hagan falta una serie de fichajes evidentes y que Meriton sea un desastre en gestión durante estos últimos años. Todo cabe en la misma frase, no es excluyente, pero no es de recibo para un club como el nuestro.