La dificultad de confiar en Meriton y errores que se repiten

Nuevamente el Valencia llega al final de una ventana de fichajes con los deberes por hacer y numerosas fracturas internas, es algo decepcionante pero que no sorprende

Jose Hernández | 18 ENE. 2022 | 08:30
Anil Murthy y Bordalás

La aparente unión que existía dentro del Valencia CF se ha venido abajo como un castillo de naipes en pocas semanas, la realidad empieza a salir a la luz y de los acontecimientos y las palabras de Bordalás se extrae que la relación entre el cuerpo técnico y sus superiores no es buena. Los hechos son claros e indiscutibles, ha pasado más de la mitad del mes de enero y la entidad no ha incorporado a ningún jugador, algo que al entrenador alicantino no le ha gustado ya que en cierto modo se siente engañado. ¿Es una situación nueva? evidentemente no, ya hubo discrepancias con Marcelino y con Javi Gracia.

Con ello no queremos decir que Bordalás tenga absolutamente toda la razón, pero sí es entendible su enfado. El técnico participó de manera activa en los fichajes de este verano y se le concedió la carta de Marcos André, el brasileño no está funcionando y ésta es una de las excusas utilizadas por el club para restar margen de maniobra a Bordalás. Pero tampoco sirve de justificación a cómo se está trabajando, se cuenta con un secretario técnico que también parece tener poco margen de decisión y un presidente que no convence a nadie pero que sigue en el puesto. La estructura deja mucho que desear y así es muy difícil acudir al mercado y acertar.

Y en lo más alto de la pirámide encontramos a Peter Lim, quien prometió a Bordalás una reunión pero que por diversas razones ha declinado esta posibilidad. Dice muy poco de las intenciones y el interés del propietario por formar un buen equipo, y evidentemente el curso de los acontecimientos está decepcionando a un técnico que nota cómo su plantilla está acusando la falta de calidad y fortaleza. Bordalás sabía al club que venía, asumió el reto con todas las consecuencias pero es lógico que esperase que algunas cosas cambiaran de verdad. Lo ocurrido en las últimas semanas demuestra que va a ser un proceso largo y cargado de espinas y desencuentros, por lo pronto el mercado de fichajes llega a la recta final y no han llegado refuerzos que permitan soñar con Europa.