La política de fichajes del Valencia en el invierno 2022

Las opciones que se quieren en propiedad apuntan al verano, y ahora mismo se busca gente que quiera competir 6 meses... y quizá el año qiue viene

Toni Hernández | 17 ENE. 2022 | 07:00
Corona y Bordalás

Los fichajes del Valencia de invierno van a seguir un patrón marcado por las circunstancias económicas de la entidad, y por el plan que se tiene en junio con distintos nombres que hay encima de la mesa. El club insiste en que hay margen de Fair Play Financiero, y el técnico alicantino repetía el pasado viernes que no se plantea el hecho de que no venga nadie. Y repito, los dos dan la sensación de ir de la mano en este momento del año, porque los mensajes están contestados, aunque Murthy abusa de las filtraciones y Bordalás siempre va de cara.

Si hay una serie de jugadores señalados en rojo para el verano que viene, por distintos motivos, pero la necesidad aprieta en lo que queda de temporada, que es algo muy evidente, la solución no es tan compleja y requiere de una piel normal… es decir, que no sea especialmente fina ni nos entreguemos de forma desesperada en brazos de un nuevo drama que nos haga enloquecer. Si no podemos comprar habrá que pedir prestado hasta el 30 de junio, y no pasa nada por ello. Peter Lim, si le da la gana, tiene los suficientes contactos como para conseguir las cesiones de dos jugadores que necesita el equipo como el comer. Un central es la primera prioridad, porque aunque el centro del campo está cojo, y más viendo el nivel de Racic y de Wass (especialmente los últimos partidos), está claro que no se puede tocar a nadie más para mandarlo atrás.

Si además de esa primera operación a préstamo hay una segunda que permite reforzar la mal llamada zona ancha, más contento estará Bordalás, aunque ahí se necesita un perfil que el técnico ya ha dado: Wakaso. Menos de una vuelta puede ser positivo, incluso teniendo que jugar la Copa de África, porque si viene el central, efectivos tenemos, aunque sigamos estando cortos. Es moverse, trabajar de forma estrecha con la parcela deportiva del club, y que Bordalás entienda que esos nombres son válidos para su equipo. No creo que veamos un mercado como el año pasado, cuando llegaron perfiles que ni contaban para el entrenador por muchas cosas. Aunque saldremos de dudas en breve.