Las carencias deportivas del Valencia son las mismas que en agosto

Que el equipo pueda proponer más depende no sólo de querer, que es obvio que se quiere, sino también de poder de un modo ordenado

Toni Hernández | 04 DIC. 2021 | 08:30
Daniel Wass

"El Valencia no juega a nada y no tiene calidad". Es un resumen del pensamiento de muchos aficionados del equipo después del partido contra el Rayo Vallecano. También es un poso que se está dejando en parte de la opinión pública, primero porque apoya el relato social, y segundo porque no deja de ser cierto, al menos en parte. Que el equipo no propone nada no es cierto, aunque lo que veamos no nos guste. Bordalás está basando este Valencia en que no reciba daño, como pasó ante la Real pero no ocurrió frente a los madrileños. Y ahí está la diferencia entre una visión y otra. El planteamiento era el mismo, y la idea de partido también, y hubo 45 minutos, como dijo Soler, "o sé por qué nos hemos venido abajo en la segunda parte. Hoy era clave para engancharnos a Europa".

Jugar, jugamos a lo mismo que en los tres partidos anteriores. Y la calidad, obviamente, también es la misma, que no hemos fichado a nadie y ningún jugador ha empeorado o mejorado de forma sustancial. Uno de los problemas que tiene este equipo es que está sujeto por alfileres en el centro del campo, y que cuando esa parte no carbura y es superada de forma clara por el rival, todas las costuras nos saltan. La contundencia defensiva, en general, es otro factor importante, y por ahí nos duele y mucho. Pero seguimos proponiendo lo mismo y teniendo la misma calidad.

¿Cómo solucionarlo? En el corto plazo con trabajo, no hay otra, y por muy tópico que pueda sonar, es que no existe otra manera de hacerlo. El margen de mejora de este grupo es enorme, eso lo sabemos todos, y esta travesía del desierto en muchos momentos es otro factor con el que sabíamos que debíamos contar. Bordalás tiene claro lo que quiere, y sabe con lo que cuenta. Ni él ha cambiado ni el grupo tampoco, aunque los resultados no siempre, ni mucho menos, los que todos queremos y esperamos.