Fernando Gómez Colomer también es el Valencia

“Si quieres quedarte en el Valencia, no importa tanto el proyecto y tampoco el salario, porque no hay obstáculo insalvable si el deseo es continuar”. La frase la firma cualquier valencianista del mundo, pero resulta que, además de eso, es de una de las leyendas más grandes de la historia de este club, Fernando Gómez Colomer. Muchas veces deslegitimado por aquellos de no ganar nunca un título, yo mismo lo he hecho y le vuelvo a pedir disculpas, cuando Fernando habla hay que escuchar. Como con todos. Pero en su caso, como en el de otros, habla un ex jugador y un valencianista, que en caso de haberse dedicado a ser tornero fresador, también lo seguiría siendo, porque lo ha vivido y mamado desde que nació.

No estoy de acuerdo siempre en lo que dice, no somos amigos aunque tenemos una buena relación, pero si analizamos la historia de nuestro, esa a la que tanto miramos pero de la que omitimos muchas cosas demasiadas veces de forma deliberada, veremos que está fraguada de episodios como ese. Empezando por el propio Fernando, que fue de los que no se marchó, pudiendo hacerlo, cuando el equipo bajó a Segunda o en años postreros. También hay casos contrarios, por supuesto, y lo hemos vivido por ejemplo con Ferran Torres, sin entrar en más detalles que ahora no vienen al caso. El problema viene cuando tipos como él tienen que explicar sus razonamientos, por no ser de la corriente que toca o de la mayoritaria.

“Que si fuese yo, me quedaría. Que proyecto y salario no son obstáculos insalvables, que no son absolutamente condicionantes. Pero parece que a algunos esto tampoco les parece bien”, comentaba en twitter. No pongo su opinión por encima de las de otros ex aunque con esta sí esté de acuerdo, pero digo que se debe valorar en justa medida. Y que tiene un plus de razón moral, primero porque él practicó con el ejemplo, y segundo porque lo dice un valencianista que lo es desde que vino al mundo. ¿Es importante? Para entender todos los detalles no es que lo sea, es que resulta del todo imprescindible.