Si el Valencia quiere ir a Europa debe dar mucho más

El Valencia - Rayo Vallecano debía ser el partido clave para mandar a los de Bordalás a la lucha por las posiciones de arriba. Los locales, de nuevo,  salían sin delantero centro y con la idea de esperar y buscar la espalda al rival. Los primeros 10 minutos fueron de tanto absoluto, sin que pasara nada destacable en ninguna de las dos áreas. Pero desde momento, el Rayo empezó a carburar, robando arriba y generando llegadas peligrosas. En el minuto 17, después de una larga revisión del VAR, el árbitro pitaba penalti a favor del Valencia, bastante claro. Y Carlos Soler hacía el 1-0.

Justo tras el gol, Mestalla se llenaba de carteles con Lim go Home y el estadio poniendo a la propiedad que se fuera. El partido, volviendo al fútbol, se ponía en cierta forma como quería Bordalás. Pasada la media hora, el encuentro volvía a quedar anestesiado, aunque de nuevo los visitantes pisando más el campo rival. Hasta el final de la primera parte, Diakhaby y Alderete veían amarilla, y eso podía condicionar el encuentro, porque no había más centrales. Con ventaja local se llegaba al descanso.

La segunda parte empezaba sin cambios, y lógicamente, con la idea de hacer muchos daño al Rayo que debía abrirse con el paso de los minutos. Nada más arrancar, Isi ponía a prueba a Cillessen, que respondía bien. En el 48, enorme jugada de Guedes y Foulquier, que la defensa del Rayo sacaba con boca de gol. Y en el 49, después de una enorme lucha de Wass, Guedes no hacía el 2-0 por muy poco. En el 55, una falta lateral de Soler no era gol por centímetros. Y en la siguiente jugada, contra brutal del Rayo que Hélder Costa salvaba sobre la raya de gol. Pasado el minuto 60, y tras un cuarto de hora eléctrico, era hora de los cambios. Foulquier veía amarilla en el 61, y como Diakhaby, baja para Vigo. Guedes se iba en el 62 y entraba Maxi Gómez. Y en el 63, jugada muy extraña, parada de Cillessen casi milagrosa, pero Isi Palazón hacía el empate.

En el 66, Hugo Duro no hacía el 2-1 porque el portero visitante también protagonizaba otra parada gigante. Apretaba el Rayo buscando el segundo, y los de Bordalás no podían ni cruzar el medio campo llegando al minuto 70.  Foulquier no marcaba en el 80 por poco despumes de otra gran jugada. Y en el 81, se marchaban Wass y Costa para dar entrada a Cheryshev y Musah. En el 84, el Rayo no marcaba porque su delantero no llegaba cuando estaba solo, y el partido iba a tumba abierta otra vez. En el 87, Hugo Duro y Guillamón daban paso a Marcos André y Koba. Otra vez se terminaba con dos delanteros centros habiendo empezado sin ninguno. La tenía en el 91 Marcos André, pero su remate se iba alto. En el 94, Diakhaby salvaba el 1-2 a un disparo de Bebé. Y con esa jugada murió el partido.