La unión en el Valencia, algo en lo que dejé de creer, y que quizá sea verdad por fin

¿Puede existir la unión en torno al Valencia? ¿De verdad podemos estar todos juntos a favor de algo, nuestro club, y no sólo en contra de alguien, como ha pasado tantas veces en la historia? Durante años pensé que sí, que eso era el mayor potencial que tenía esta afición. Pero con el tiempo, y sobre todo con los hechos, aquello se me fue olvidando, como si se borrara de mi cabeza, hasta el punto de pensar que era totalmente irracional, imposible, que jamás se podría dar a favor de algo. Y digo a favor porque unirse contra un enemigo común en sencillo, pero cuando el enemigo se termina, el problema vuelve a ser el mismo.

Lo he visto, todos, varias veces en los últimos 30 años. Ponerse en contra de Peter Lim es "fácil", porque su gestión desde hace algo más de dos años es tan absurda que sólo con tener dos ojos ya te debes poner delante. Pero eso, repito, es lo fácil. Lo complicado es sentarse en una mesa y decidir que sí, que Lim es el enemigo y que hay echarlo, pero sobre todo, diseñar el plan para el primer día sin él, el momento en el que se haya ganado la batalla. Que nadie duda que se ganará, porque ahí el tiempo siempre juega a favor, pero el segundo paso es tan importante como el primero.

Si nos unimos en las dos cosas, y ahí soy muy de Santo Tomás: "si no veo en sus manos la señal de los clavos y meto mi dedo en el lugar de los clavos, y meto mi mano en su costado, no creeré". Vamos, el coloquial si no lo veo no lo creo. Tenemos una gran ocasión delante de nosotros, pero muy grande. Todos, los aficionados y aquellos que, teniendo el dinero, pueden dar un paso al frente y unirse también para comprarle el club a Lim. Habrá en la historia pocos contextos tan favorables para algo así, con el apoyo general, como el que estamos viviendo ahora.