Cerrar la portería del Valencia como obsesión de Bordalás

Fuera de casa se encaja casi siempre y muy pronto, y eso condiciona sin lugar a ninguna duda los partidos, porque no se puede ir siempre a remolque

Toni Hernández | 16 OCT. 2021 | 07:30
Cillessen y Paulista

El Valencia debe cerrar su portería de la manera que sea necesaria. Fue uno de los grandes males del curso pasado, y casi también del anterior especialmente lejos de Mestalla, y aunque este curso las cosas parece que marchan un poco mejor, no se puede bajar la guardia de ninguna de las maneras. El equipo ha encajado 8 goles en 8 jornadas, aunque ha dejado su portería a cero en 3 ocasiones, lo que supone casi el 50% de los partidos. Los 3 goles que se recibieron en Sevilla son los que afean la estadística, ya que si sacamos ese encuentro de la ecuación, serían 5 goles encajados en 7 partidos, que serían números excelentes.

Fuera de casa, que es donde ha estado la sangría como decimos estas dos últimas campañas, de 4 partidos jugados, se encajó en 3 de ellos, y sólo se hizo portería a cero en Cádiz, donde se sacó un empate. Y ahora vamos a Barcelona, a jugar en el Nou Camp, que aunque anden con constipados, no podemos despistarnos, porque siguen teniendo jugadores de primer nivel mundial. Si queremos estar arriba, si la idea es llegar a las últimas 10 jornadas para jugarnos un puesto en Europa, y ya veremos de aquí a entonces de cuál estamos hablando, lo primero es ser muy fuertes atrás, no recibir goles con facilidad.

Por cierto, si vemos lo que pasa a domicilio, los 3 choques en que perforaron nuestra portería, siempre marcaron ellos primero, y no sólo eso. El gol del Granada en el minuto 16, el de Osasuna en el 8 y el primero del Sevilla en el 3. Es decir, nos meten casi siempre antes, y sobre todo, muy pronto, con lo que la moraleja de todo esto es muy sencilla: a los partidos, sobre todo los de fuera de casa, se debe salir a tope desde el minuto cero.