El día que sólo soñaba vivir como aficionado del Valencia

Hoy se cumplen 19 años de un momento que una generación veía como un imposible, pero que se dio, como puede suceder con todo

Toni Hernández | 05 MAY. 2021 | 07:30
Liga de Málaga

De pequeño soñaba con ver al Valencia campeón de Liga alguna vez. Tendría 12 años cuando descubrí en mi casa “La Gran Historia del Valencia”, del maestro añorado Jaime Hernández Perpiñá. Mi padre compró el libro en 1975, poco después de nacer yo, y creo que lo hizo para mí. La Liga del 71 era uno de los últimos capítulos, y se le dedicaba un espacio grande. Veía aquello y no me cuadraba que mi equipo, volvía de Segunda, hubiera sido campeón hacía tan poco tiempo.

Ver a Paquito levantado el trofeo en Mestalla es una imagen que siempre recuerdo, y que cada vez que lo veo por el barrio (vivimos muy cerca), pienso que debo hacerme una foto con él. Aquel libro marcó mi adolescencia, mientras nos hacíamos mayores con Espárrago, Fernando, Arias, Lubo, y todo aquella gente que marcó a una generación como la mía. Pero ser campeón de Liga era otro rollo. Cuando en 1996 nos fuimos a Vigo teniendo opciones era como tocar el cielo, aunque en aquella ocasión era poco menos que imposible… y se terminó por no dar.

Pero el 5 de mayo de 2002, 15 años más tarde de leer aquel libro inolvidable, llegó la tarde en la que el Valencia podría proclamarse campeón en Málaga. Lo que sucedió aquel día, los goles, las celebraciones, está más que contado y visto. Casi 2 décadas se cumplen de ese momento. Ese día, igual que la final de Copa del 99, marcó un cambio en la historia de este club. Un cambio gigante, que por desgracia y con la perspectiva del tiempo, no supimos aprovechar.

Pero a los de mi quinta nos regaló el mejor momento de nuestras vidas, el que no esperábamos pero soñábamos. No se trata de recordar la efeméride, que un poco también, sino de tener claro que las cosas pueden pasar, que a veces tardan, pero que se terminan dando. Un nuevo Valencia empezó aquel día. Quizá no estemos tan lejos de otro comienzo… que pocos esperan.