¿Qué es tener una buena cantera y un buen filial?

Qué es ser un buen filial para el primer equipo, del Valencia o del club que sea, es un debate tan viejo como andar, aunque con dos planos muy distintos. En la calle, a nivel de aficionado e incluso de medio de comunicación (lo que es más peligroso), lo que importa es estar en la mayor categoría posible, ganar muchos partidos y que seas campeón en todas las categorías. Nadie dirá que esto es un mal argumento, pero elevarlo a la categoría dogma, pensar que o pasa o todo es un desastre, es absolutamente exagerado y está fuera de lugar.

Si a cualquier entrenador de fútbol base le preguntas qué quiere, te dirá que a eso de ganar partidos no le pondrá nunca mala cara, pero por lo que se medirá si es bueno o no será por los jugadores que lleguen al máximo nivel y hayan pasado por sus manos. Si eso lo extrapolamos a un club, al Valencia en este caso, que el Mestalla estuviera en Segunda y peleando por el título sería lo que más quisiéramos. Pero por encima de ello, que un jugador al año, uno sólo, se consolidara en el primer equipo, sería mucho mejor.

Entiendo que ahora mismo todo son excusas más o menos bien traídas para darle muy duro a Meriton por su gestión a todos los niveles. Pero como en cualquier ámbito de la vida, ni se hace todo bien ni se hace todo mal. El Mestalla está pasando un año terrible a nivel de resultados, y bien mal que me sabe por mi amigo Óscar Fernández, pero si en dos años hay 4-5 jugadores en el primer equipo de los que este año debían estar con el filial y les ha tocado sumar con los mayores, firmo estar en la quinta categoría del fútbol español. Y que a nadie se le olvide que estar en el filial y entrenar con el primer equipo, te forma mucho más que ser futbolista de Segunda A y apenas tener minutos.