Siempre hacemos de menos a Carlos Soler en el Valencia, y no tiene sentido

Ser bueno, cumplir siempre, jugar donde sea, y nunca protestar, le penaliza, aunque para un entrenador es un auténtico tesoro

Toni Hernández | 18 MAR. 2021 | 08:00
Carlos Soler

No entiendo la razón por la que siempre hacemos de menos en el Valencia a Carlos Soler. Alguno me dirá que sólo soy yo, y servidor le contestará que si fuera así, no estaría escribiendo este artículo. Soy de los que tiene claro, hace años, que el chino es un pedazo de futbolista como la copa de un pino. Lo llevo viendo con regularidad desde que era juvenil, le vi jugar sus primeros partidos en el Mestalla, y como todos, he visto su evolución en el primer equipo. Lo primero, una vez más, es dejar claro que ni es medio centro ni es banda derecha.

Es un interior brutal, con trabajo, calidad, sacrifico, llegada, último pase y gol. Y que si jugara el equipo con 3 por dentro, veríamos en toda su extensión. Esto, por cierto, sólo ha pasado con Voro y en su primero momento con los mayores. Ese es un asunto, que es importante, pero hay más, claro. Soler tiene un problema para el público que es la bendición que busca cualquier entrenador. Puede jugar de lo que sea, sin protestar, rendimiento y cumpliendo, y ayudando al equipo aunque eso suponga que él no brille nada.

Es muy complicado encontrar ese perfil en el fútbol profesional, aunque más de uno no se lo crea. Tengo claro que eso le ha penalizado, lo mismo que el hecho de que este año haya tenido que ser el cerebro porque no había nadie más, en un equipo que ha jugado un sistema que no era el mejor para esos jugadores. Pero con todo y con eso vuelvo a repetir: Soler será titular con todos los entrenadores que vengan, y como se haga sitio en la selección, pasará lo mismo. Al tiempo.