Escepticismo moderado ante el nuevo rumbo del Valencia CF

Opinión/ Está claro que van a ocurrir cosas importantes en los próximos meses, la actitud del entorno debe ser firme y responsable

Jose Hernández | 07 MAR. 2021 | 08:00
Príncipe de Johor y Peter Lim

La gestión de Meriton ha tocado fondo esta temporada, al menos esa es la sensación si tenemos en cuenta las decisiones tomadas y el efecto que produjeron en el equipo. Peter Lim logró dinamitar dos buenos proyectos en este tiempo, el de su primera etapa y más tarde a un equipo que había sido campeón y soñaba con cotas importantes. Desde su llegada a la capital del Túria la actitud de Lim fue fría con los aficionados e incluso con sus empleados, el propio Javi Gracia ha reconocido que no tuvo la oportunidad de hablar con él en ningún momento.

Ahora se avecinan cambios importantes aunque el oscurantismo y las sorpresas siguen reinando en la actualidad valencianista. La previsible llegada del Príncipe de Johor abre un nuevo escenario, pero nadie sabe el camino que adoptará el club en el futuro. Si Peter Lim decide echarse a un lado de alguna manera y piensa en una futura venta de sus acciones será una buena noticia, después de lo que se ha visto es muy difícil pensar que se pueda gestionar peor un club de fútbol. Solo por eso ya sería para tener algo de optimismo moderado. Se desconoce si Tunku Ismail tendrá control total o si entrará invirtiendo algo de capital en la entidad, todo indica que sí.

Se alzan voces escépticas que opinan en la línea de que tendremos más de lo mismo, y es lógico y necesario que las dudas estén en el aire después del desengaño vivido con Peter Lim. De la misma forma, el Príncipe de Johor y su proyecto deportivo merecen el margen de la duda y algo de tiempo. Nunca deben repetirse escenas como las que se vivieron en la llegada de Lim, en aquellos días pudo la ilusión y el máximo accionista no devolvió con buenos hechos el cariño recibido. El fútbol es una ruleta de emociones pero a partir de este momento el valencianismo está obligado a ser más consecuente que nunca, el futuro de la entidad está en juego y ahora mismo la única alternativa viable es la que se plantea.

Van a ser meses para analizar movimientos e intenciones, para vigilar y fiscalizar cada paso extraño que puedan dar Lim o sus socios. Pero la realidad del presente también invita a no juzgar y demonizar de antemano a las nuevas caras que puedan llegar...ojalá dentro de unos meses se pueda haber recuperado algo de ilusión por el Valencia CF. Sería la mejor noticia.