Hacer de menos al Valencia, un mal que sólo es culpa nuestra

Nos empeñamos en hacernos pequeños nosotros mismos, y no cambiamos de opinión ni aunque los hechos nos digan que no tenemos razón

Toni Hernández | 10 FEB. 2021 | 08:30
Paulista y Murthy

Hacer de menos al Valencia, al club, es algo que se ve demasiadas veces en nuestro entorno. Pensaba que ya había superado esta sensación, que en junio si Dios quiere me caen 47 palos. Pero no, me he dado cuenta que no. Es más, me temo que con la vejez me voy a volver mucho más insoportable que hasta ahora. Están siendo unos días especialmente calientes por las cosas que pasan en nuestro club, y partiendo de una base muy clara, me importa un carajo quién mande, lo que no puede entender es cómo nosotros tenemos la visión de que somos un club poco menos que de barrio, que aquí no quiere venir nadie y que tampoco se quiere quedar ninguno de los jugadores importantes que hay en la plantilla.

El ideario populista está bien, pero la realidad de los hechos es terca como una mula, aunque ni queremos rendirnos ante ella cuando es evidente. ¿Gabriel Paulista es ahora un lamechinos porque renueva su contrato con el Valencia? Y no es uno de mis jugadores favoritos, vaya eso por delante. ¿Piccini no se quiere quedar en un equipo que está en Champions League, en donde podría llegar a jugar si tuviera paciencia, y renuncia a gran parte de su sueldo para volver aquí porque es un blanqueador?

¿Racic, Yunus o Soler, renovados en el último año, son pro-Lim porque deciden ampliar sus contratos con la entidad de Mestalla? Denostamos al Valencia, y lo hacemos nosotros mismos. Ni Lim ni Lam, nosotros. “Nadie quiere venir aquí”. Con todos los respeto y mordiéndome la lengua, iros al campo a dar una vuelta, que de verdad, os hace falta. Ah, y podemos bajar a Segunda, y seguiré pensando lo mismo… y la realidad será la misma.