Javi Gracia tiene que ser el entrenador del Valencia y el capitán del barco, o irse

Javi Gracia debe ser el líder de este Valencia, el que tire de él, o marcharse. Es muy injusto, y absurdo, culparle de todo lo que ha ocurrido a nivel deportivo este año. Se le engañó de forma muy sucia en verano, diciéndole que se iban los que más cobraban por temas económicos, pero que vendrían otros para poder armar una plantilla competitiva. Y ahora mismo no tiene ni refuerzos en este mercado de invierno más allá de la vuelta de Piccini, que veremos cuándo está para poder competir al máximo nivel.

En ningún momento debió presentar aquel amago de dimisión condenado al fracaso desde el primer momento. Y tanto él como su agente lo sabían. Fueron semanas que costarin credibilidad, confianza, y sobre todo, puntos. Pero ha seguido trabajando, no podemos decir que haya sacado el máximo a la plantilla, pero sí que se ve un equipo. Al menos mucho más que en el mes de septiembre. Y eso que en verano todos teníamos buenas sensaciones viendo los partidos de pretemporada.

Entiendo a Javi Gracia, empatizo con él. Todos lo hacemos. Aunque eso no quite para ver que se equivoca demasiadas veces (al menos más de las que nos podemos permitir), y que eso genere una crítica deportiva que es algo propio del mundo del fútbol. Debe ser el líder, el que cierre la puerta del vestuario y les haga ver que están solos para sacar esto adelante, y que juntos y con condianza pueden hacerlo. Y si no se ve capaz, que lo comprendería, llegar rápido a un acuerdo con el Valencia para poder tomar deciciones.