Sobre Voro, Fernando y Arias, y su concepto del Valencia

No se puede opinar de forma libre, no se puede ser hombre de club, has de ir por donde te ordenan, porque en caso contrario, eres un vendido: perfecto

Toni Hernández | 18 JUL. 2020 | 09:00
Giner, Fernando, Arias y Voro

Quien quiera que ponga en entredicho a Voro, Fernando o Arias, por el simple hecho de dar su opinión de corazón y siendo más valencianistas que el escudo, no tiene vergüenza. Y lo digo sin ningún tipo de miramientos, y no me da la gana cortarme un pelo, que ya está bien de tragar con los del pensamiento único o eres un lamechinos, un vendido o cualquier otra de las estupideces de moda. Aquí parece que sólo vale la palabra de gente como Cañizares o Kempes, que dan muchos palos, y sus razones trendrán, pero nadie los pone en cuestión.

Por cierto Mario, el otro día fue tu cumpleaños, y el Valencia, como procede, te felicitó. Igual que el Hércules. A ellos les diste las gracias y a nosotros se te debió pasar, seguro. Aquí el problema es que si no dices lo que algunos, muchos o pocos, piensan, eres un saco de basura. Y a muchos de los que se dedican a ser los guardianes de la moral, encima les cabrea que les recuerden que han cambiado de postura más que de calzoncillos.

Aquí hay un señor que se llama Peter Lim, que hace cosas bien y muchas cosas mal, pero que es el dueño porque ha puesto más dinero que nadie en la vida. Y después hay un entorno que piensa de forma libre, sin que nadie le diga lo que debe decir. De Voro, Fernando y Arias, al que más y mejor conozco es a Richard. Si alguien osara decirle qué tiene que expresar de forma pública, lo habría mandado a donde han puesto columpios. Dejad que cada uno piense lo que le dé la gana, guardianes de la moral, de pacotilla.