¿Qué supone tener una plantilla larga para el Valencia?

Que se tengan dobladas todas las posiciones es algo fundamental, que no se le escapa a nadie, pero que también conlleva sus problemas

Toni Hernández | 10 AGO. 2019 | 07:00
Francis Coquelin

Marcelino quiere una plantilla del Valencia que tenga todos los puestos doblados. Quien vea aquí algo raro que se lo haga mirar, y en profundidad, así, de salida. Es lo más normal del mundo, y más pensando que el año pasado nos fuimos a 60 partidos. Y el técnico gallego tiene claro, porque así se lo dijeron en persona en Singapur la última vez que estuvo, junto a Mateo Alemany también con Pablo Longoria, que las posibilidades económicas del club en este mercado, sin ventas, eran las que eran, y eso significaba pelear mucho ls opciones que tenían con la complejidad que eso supone. La decisión de club de no volver a sacar nadie TOP de la plantilla por segundo año consecutivo es bueno, por lo evidente, y no tanto porque tú margen de mejora a nivel económico no existe. Son las normas del Fair Play Financiero.

Se pretende, y es lo que pide Marcelino, doblar el lateral zurdo por la salida de Lato, que los centrales sean 4, porque siendo 3 con tantos partidos el riesgo de problemas es muy elevado, y el futbolista ofensivo es la duda que se tiene, ya que por un lado se pretende alguien por Parejo, aunque opciones hay en la plantilla, y por otro se busca el cuarto delantero que permita la misma tranquilidad que con los centrales. Lo que se demanda es normal y lógico, y Peter Lim debería acceder a ello viendo los perfiles, aunque otra cosa es que alguna gente buena no se haya hecho y eso haya generado segundos escenarios que no conocemos.